El escritor y periodista argentino
Hernán Casciari, fundador del blog, revista y editorial Orsai, comunicó el
pasado cuatro de Septiembre a través de su blog que el número dieciséis de la
revista será el último que se publicará, pero que volverá el próximo año con un
nuevo proyecto.
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| Hernánn Casciari durante una entrevista concedida a Jor Down / Fotografía de Alberto Gamazo |
Casciari comunica que la Orsai número quince se
llama “La penúltima” porque “empieza diciendo que el año próximo ya no
haremos la revista”. En su entrada del blog, dice que una idea que en un
principio iba a durar un solo año y acabaron siendo tres. Orsai, que en su origen fue un blog
creado allá por el 2001, nació de un sentimiento de soledad y tristeza que le
producía a su fundador la distancia que había entre él y los suyos, el hecho de
“no poder estar llorando con los tuyos cuando pasa algo horrible, no poder
estar festejando con tu gente cuando pasa algo maravilloso, te pone
directamente en fuera de juego”, pues Hernán lleva viviendo en España desde el
año 2000; es de ahí de donde surge el nombre de Orsai, que según explica, “viene a
decir en jerga futbolística, justamente, que uno está fuera de juego, que no
estás habilitado para jugar”. Empezó escribiendo cuentos en el blog y, de ese
modo, se creó una comunidad de lectores que fue creciendo hasta que algunas
empresas de comunicación y cultura se interesaron por él y por el blog para
ofrecerle trabajo. Casciari, que en ese momento no lo consideraba un error,
accedió. Así, Hernán, se dejó “poner intermediarios” entre él y sus lectores,
rompiendo esa relación. Una serie de problemas con las editoriales Mondadori, Plaza & Janés,
Editorial Sudamericana, Grijalbo y los periódicos La Nación y El País, hizo que renunciara
públicamente a los contratos que tenía con ellos. Entonces, decidió volver
a conectar con los lectores de su blog y comunicarles la idea de crear la
revista “Orsai”, que respetaría un decálogo con elque intentaría evitar los errores del pasado.
Hernán
asegura que “los lectores de Orsai se encargaron de difundir la idea”, pero
debido a que no quería que la revista se convirtiera “en una costumbre
rutinaria” y a los problemas económicos derivados de su forma de financiación, terminó por declarar su suspensión.
Y, es que, se vendían en paquetes de diez para que pudieran colocar las nueve
restantes entre los lectores de la zona, Hernán explica que “de este modo
matábamos también al intermediario de la distribución, que es una mafia” porque
se queda con el 50% del precio de venta de cada publicación que se compraba y
el autor tan sólo el 8%. Tras publicarse el segundo número, decidieron convertirse
en una editorial en la que el autor recibía el 50% del precio de venta.
Toda la inversión provenía del capital propio debido a la total ausencia de
publicidad.
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| Casciari con el primer número de Orsai |
El
éxito de Orsai provocó que evolucionara como proyecto cuando se decidió abrir un
bar en Buenos Aires en Septiembre de
2011 en el que 204 seguidores del blog, previa propuesta de Casciari, se
convirtieron en inversores de ese local. La idea incitó a llevarla a Barcelona
y a Centroamérica, abriéndolos con la inversión de los lectores. Actualmente, y
después de casi dos años, el
bar Orsai de Buenos Aires cerró el domingo 28 de Julio. Como explican en la página oficial en Facebook del bar: “Nos mudamos a una casa, donde no va a funcionar el bar, aunque sí seguiremos
con toda la vida de Orsai (los talleres, el quiosquito, la revista)”.
A
pesar del fin de algunos de sus proyectos y haciendo referencia a la industria
cultural, Casciari opinó
en un evento organizado por TED
celebrado en Buenos Aires en el año 2011 que la cultura debería ser libre y
gratuita: “Hoy estoy seguro que la industria de la cultura somos los lectores y
los autores, y nadie más. Y que la otra industria, la que le teme a los
cambios, la que intenta hacernos creer que Internet es un lastre […] se está
muriendo, y la vamos a ver morir”.
Javier Juan Bonmatí, para la asignatura de Periodismo en la Red (UC3M)
